jueves, 31 de octubre de 2013

Mi opinión personal sobre el fallo de la Corte por Ley de Medios

Y finalmente perdió el pueblo argentino.

El fallo de la corte en favor de la constitucionalidad de la ley de medios va totalmente en contra de la libertad de expresión y la independencia periodística, los consumidores, la incorporación de tecnologías, y la calidad futura de los servicios.

En el caso de la afectación de la libertad de expresión, quedó claramente demostrado que el desguace de las empresas del grupo impedirán a futuro disponer de una situación económicamente independiente del poder. No solo afectará su rentabilidad sino su subsistencia frente a la deuda a honrar así como también a la inversión necesaria para seguir a la vanguardia de la tecnología. Obligaría a los medios de comunicación a depender de la pauta oficial para subsistir y ello traería aparejado la pérdida de la independencia periodística.

La corte, en un argumento muy “infantil” e infundado, concluye que “existen en el país una gran cantidad de medios nacionales y locales de pequeñas y medianas dimensiones que operan sin inconvenientes en el sector”. Repasemos los casos más importantes:

Telefe, no solo pertenece a un grupo global como Telefónica (por más que el Sr Sabbatella no tenga vergüenza en hacerse el distraído) sino que además NO es independiente editorialmente del gobierno. De hecho, Aníbal Fernandez tiene su bajada de línea al público. También incumple la ley, no solo debe adecuarse en desprenderse de licencias del interior sino que su accionista es incompatible por ser licenciatario de servicio público doble (por Telefónica y por Telecom). Recibe toneladas de pauta oficial.

Canal 9, pertenece a un mexicano que tiene escala regional, que usa esa escala para comprar enlatados baratos y pasarlos en todos sus canales. Debido a la fragilidad de su licencia, tampoco tiene independencia editorial, con Victor Hugo a la cabeza. Su accionista tiene incompatibilidad con la ley por ser mexicano y además no cumple con los % de producción propia previstos en la ley. Se beneficia en forma importante de pauta oficial.

America, pertenece a un grupo que debe adecuarse. Su línea editorial es mercenaria, va y viene con el gobierno en función de las necesidades. Participa activamente en negocios petroleros con el gobierno. Recibe mucha Pauta oficial.

Perfil, que no está en el marco de esta ley porque no tiene ninguna licencia de radiodifusión o cable, se presume independiente. Esta compañía depende financieramente de su par brasilera que a través de Caras Brasil ha inyectado dinero permanentemente. El costo de operación local es muy menor. No recibe pauta oficial, ganó un juicio en la corte y aun así sigue sin recibirla.

La Nación, que tampoco está enmarcado en esta ley, tiene independencia periodística, pero sufre todos los ataques del estado desde Papel Prensa. Sus accionistas están invirtiendo fuertemente en el exterior.

Ambas empresas gráficas están inmersas en el desplome de la industria papel, seriamente comprometidas a futuro.

Telecentro, una compañía regional que tiene innumerables “licencias” gubernamentales para operar como quiera, cablear sin autorización formal, etc. Es una compañía siempre en venta. Su canal 26 mantiene algunos periodistas históricos independientes y ha incorporado otros no tanto. Su canal se beneficia de pauta oficial en los programas afines al gobierno.

CN23 y el grupo Garfunkel-Spolzki es vergonzoso en recepción de pauta oficial. Lo mismo las señales y radios de Electro Ingeniería y las de Cristóbal Lopez… Se referirá quizás a las empresas de cable locales chiquitas que se enfrentan sin éxito hoy a Directv, a las telcos incumbentes o a las cooperativas monopólicas del lugar? O a las miles de radios, canales truchos y diarios que dependen exclusivamente de pauta oficial y que responden editorialmente al caudillo local de turno?

En todo caso, nunca estuvo en el juicio probar esto, sino que este comentario “naif” de la Corte es totalmente infundado y falaz.

Incluso aún peor, la propia Corte dice que “a pesar de la reducción de rentabilidad, la compañía puede reestablecer el equilibrio en el flujo de fondos ajustando algunas variables, tales como prescindir de empleados, incrementar los precios de servicios y reducir las inversiones de capital …” Indudablemente la Corte sabe de Excel, pero no entiende de mercado ni la industria sobre la que falla. Sugiere despedir empleados (Cablevisión creció más de 1500 puestos de trabajo en los últimos 5 años totalizando 9500 empleados directos), aumentar los precios como si estuviéramos en un mercado monopólico, sin competencia y con total inelasticidad de precio demanda (jajajajajaja) y reducir las inversiones de capital, justamente el único motor que pemitirá seguir bajando la brecha digital en el país… Insólito!

Entrando en la faz de Cablevisión exclusivamente, en el juicio, quedó demostrado que la escala es un elemento indispensable para la continua evolución tecnológica de los servicios, el abaratamiento de los costos medios, la mayor capacidad de compra para abaratar los insumos importados y lograr mayor capacidad financiera para reinvertir en mayor infraestructura y nuevas plataformas.

Esto no es nuevo. Acabamos de volver de una de las exposiciones de tecnología más importantes del mundo, donde se presenta hacia dónde va la tecnología y dónde están haciendo punta en su desarrollo e implementación. Allí uno ve como se crean nuevos productos tecnológicos que soportan más densidad de clientes con más ancho de banda, permitiendo abaratar el costo por cliente final y en definitiva dando una mejor experiencia a los usuarios.

La escala no es cuento. Si no, cómo hace Telefónica para lograr costos de módems, fibra y tecnología mas baratos que cualquier operador del país? Un modem wifi de Telefónica lo paga 20 dólares en tanto que un modem wifi un operador importante del país lo paga 85 dólares en su versión más moderna y 60 dólares en una versión de menor capacidad… Telefónica tiene más de 100 millones de clientes en el mundo. El mayor operador de cable del país, Cablevisión, solo 3,5 millones y lo buscan atomizar…

Como hace Directv para acceder a derechos de programación exclusivos o a costos de cajas digitales y hd tan bajos? Solo en Latinoamérica cuenta con 16 millones de clientes y 46 millones en toda América.

La escala cuenta.

Cuál es el sentido de la ley de medios?

Desguazar Grupo Clarín.

Para qué?

El argumento de la desmonopolización del mercado es totalmente falaz y se demostró en el juicio. Definitivamente no existe posición monopólica, en tanto que Cablevisión compite en toda su cobertura con Directv (que también ofrece triple play en cooperación con las telcos) en materia de tv paga y con las telefónicas en el servicio de banda ancha. Además compite en muchas localidades con empresas locales o regionales, por ejemplo: Telecentro en todo AMBA (excepto en La Matanza donde Cablevisión no tiene cobertura y Telecentro ), Con CableHogar y Cable Express del grupo Bandiera en Rosario y en Salta, Con BVC de Pizzolo en Bahia Blanca, con Giga en el litoral, con otros 4 operadores en Formosa, y con varias otras compañías más chicas en otras localidades menores… Tiene 41% del mercado de video y 25% del mercado de banda ancha. El mercado crece a un ritmo importante y es definitivamente Directv el que más crece de todos los operadores en el país, alcanzando los 2,3 millones de abonados.

En el mercado de contenidos, tv abierta, señales y radios, Grupo Clarín es en general el más valorado por la gente, hay múltiples opciones y el consumidor elige.

Entonces?

Claramente se buscan dos factores principales y uno accesorio:

 • Neutralizar el poder periodístico de Grupo Clarin callando las voces críticas (tanto en canal 13, en TN como en Radio Mitre)

 • Debilitar al grupo sacándole la empresa que además representa el 75% del Grupo Clarín que es Cablevisión.

 • En un tercer plano, y esto ya es para la corruptela a que nos tienen acostumbrados, desguazar Cablevision para luego venderla a un operador que concentre y lucrar con la diferencia. En estos 4 años, el valor de los activos de Cablevisión, a pesar de los 1,400 millones de dólares invertidos desde el 2007 a la fecha, se ha deteriorado producto del conflicto con el gobierno. No se puede tapar el sol con la mano. La compañía para sobrevivir a las telcos, a los nuevos ingresantes como los Netflix, Googles, etc. debe lograr escala, no atomizarse. Pasado un tiempo, cualquier operador internacional estaría más que contento en comprarla (Slim o cualquier otro operador)… Y por supuesto, en el mientras tanto, transformar a Cablevisión en una caja importante para negocios espurios como lo hacen en Aerolíneas, etc.

Al final, no solo pierden los consumidores, los usuarios y las futuras generaciones. También pierden los empleados. Pierde el país.